y entonces cuando escruté su mente una vez más como si habriera un melon, caí en la cuenta . ! ese mortal no sabe lo que es! ¡nunca ha leido sus propios titulares! ¡de hacho, no recuerda siquiera los episodios de su vida en un orden coherente y no podría, en realidad, confesar los crimenes que ha cometido, pues realmente no los recuerda y nisiquiera sabe que esta noche va a matar! ¡no sabe lo que yo sé de él! !ha que triste y lastimoso! había extraido mi peor carta, no cabia duda.¡oh, dios santo! , ¿en que estaba pensando para decidirme a cazar a éste, cuando bajo las estrellas está lleno de bestias más astutas y depravadas? quize llorar..
Atte
Lestat Lincourt
No hay comentarios:
Publicar un comentario